Si te pareces a mi solo un poquito chiquito, eres adicta a los tacones, bien altos, los usas a diario, y no te los quitas ni aunque tengas los pies en llamas del cansancio o sangrando de tanto bailar. Pero si no te pareces tanto y tu uso de stilettos no es tan exagerado como el mío, igual debes seguir leyendo.
Un estudio de la Manchester Metropolitan University y la Universidad de Vienna investigó el efecto muscular del uso intensivo de tacones en las mujeres. Al medir la longitud de la fibra muscular de los músculos de la pantorrilla, encontraron que las fibras de las mujeres que usaban tacones eran 13% más cortas que las de las mujeres que usaban zapatos planos. “Esto confirma la hipótesis de que cuando se pone el músculo en una posición más corta, las fibras se acortan”, aseguró Narici, uno de los investigadores del estudio. Además, se encontró que los tendones eran más gruesos y rígidos en las mujeres que usaban tacones que en las que utilizaban zapatos planos. Esto significa que, en el transcurso de nuestra vida la necesidad innata de presumir nos hace un poco de daño, y como ninguna de nosotras va a dejar de usar tacones, hay que hacer lo posible por minimizar los daños del glamour. Pablo Sotelano, especialista en tobillo y pie y miembro de la Sociedad Argentina de Cirugía del Pie y la Pierna, explica que “aunque las lesiones que producen el uso permanente de tacones de más de siete centímetros (2.7 pulgadas), quizá serían inevitables, hay ejercicios que se pueden hacer, ya sea para moderar el efecto, o bien para retrasarlo”. Estos ejercicios incluyen estiramiento como elongación gemelar, el conocido Heel Massage o masaje del talón, y otros estiramientos que se pueden incorporar a cualquier régimen de yoga o Pilates. Sé que ya te imaginabas que en alguna parte de este blog te iba a mandar a hacer ejercicios. Dale que para luego es tarde. Aquí tienes algunos ejemplos simples que debes hacer con frecuencia. Cuida de tu cuerpo que no podrás cambiarlo por otro por largo tiempo. Pero eso es un tema para otro blog.