Aplica un poco de jugo de limón. Este tratamiento funciona por varias buenas razones; el jugo de limón es un astringente natural, por lo que te cerrará los poros. Su gran acidez matará muchas de las bacterias que obstruyen los poros y tiene poderes naturales para aclarar, lo que reducirá el enrojecimiento de los granos. Coloca el jugo de limón directamente sobre el grano y déjalo hasta la próxima vez que te laves el rostro.