Vivimos la vida de prisa. Entre el trabajo y otras responsabilidades se nos va el tiempo, a veces, sin recordarle a nuestros seres queridos lo mucho que los queremos, lo valiosos que son. Aquí 5 maneras muy simples llevarle alegría a esas personas que amamos y valoramos.
1- Regalitos “Solo para ti.” Lo importante no es el valor del regalo, si no, que esa persona sepa estás pensando en el, o ella. Su chocolate preferido, una flor, una notica en el mostrador con algún mensaje dulce que vean al legar a casa.
2- Roza su piel. Varios estudios reportan una relación positiva entre en contacto con la piel y la salud física y mental. Las parejas y los familiares que mantienen una relación afectuosa se han comprobado más conectadas y felices. No tiene que ser nada intimo. Un abrazo cuando se ven o antes de partir, una caricia en el hombro al pasar, hasta un suave empujoncito en gracia en el pacillo se vale para hacer al otro sonreír.
3- ¿Te acuerdas cuando…? Compartir recuerdos de momentos felices con esa persona le hará sentir que es importante para ti, que aun piensas en el o ella.
4- Haz algo especial. Todos tenemos un talento especial, o, por lo menos, algo que hacemos que los demás disfrutan a full. Si sabes cocinar invita a esa persona a disfrutar de tu mejor plato. Si tienes dotes artísticos, un álbum de recortes con fotos que cuenten la trayectoria de tu amistad será una sorpresa bella. Busca eso que se te hace fácil y úsalo para hacer sonreír a esa persona que quieres.
5- ¡Llévatelos! ¿A donde? ¡A cualquier lado! En un bolso hecha unos sándwiches, unas botellas de agua, y llévate a esa persona con quien quieres compartir a un parque o a la playa al atardecer. No lleven teléfonos ni electrónicos. Mírense a los ojos, conversen y hagan memorias nuevas para recordar juntos en un futuro.
No dejes pasar la oportunidad de decirle a esas personas importantes lo mucho que los quieres. Busca la manera, con pequeños detalles, de recordarles a diario su importancia en tu mundo, en tu vida.
De paso, tomo esta oportunidad para decirte que yo a ti te aprecio mucho. Gracias por tu tiempo. Gracias por dejarme entrar, a través de este blog, en tu espacio. Te mando un abrazo cibernético.
Recuerda siempre, La Felicidad es una Decisión!
GiGi Díaz